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25-Sep-2005 -- Salimos de Zaragoza con la intención de visitar la confluencia 41N 001W y pasar el día en el monte.

La carretera es buena en su primera mitad. Luego se estrecha, es bastante bacheada y serpenteante, aunque merece la pena por la variedad de paisajes que atraviesa, todos ellos típicos del desierto y la estepa aragoneses. Cabe destacar que se pasa por debajo del castillo de Huesa del Común. Un rincón francamente sorprendente que merece un alto en el camino.

Una vez llegados a Rudilla, donde nació la madre de Pilar, saludamos a algunos de sus familiares que se encontraban pasando el fin de semana y comentamos nuestra intención con ellos.

Salimos hacia la confluencia a pie desde el pueblo, andando por la carretera. Al poco de haber salido ya de ella y haber tomado un camino, oímos un motor. Era Jesús, tío de Pilar y natural de Rudilla, en su quad, que sentía curiosidad por ver exactamente dónde estaba la confluencia. Así que le invitamos a acompañarnos, aparcó el quad y seguimos juntos la caminata monte a través.

Encontramos varios refugios y vestigios de metralla de obús de la Guerra Civil Española de 1936 que fue especialmente intensa en esta zona de Aragón. Ganamos altura sobre el cabezo en cuya ladera NW se encuentra la confluencia, a unos 1249 m de altura (el mapa indica algo menos de 1250 m en el punto exacto de la confluencia). Las vistas desde allí son estupendas. Identificamos cimas conocidas a más de 50 Km de distancia, y eso que había cierta calima que difuminaba el horizonte.

Seguimos caminando y cuando el GPS mostró “Arriving destination”, Pilar preparó la cámara de fotos para inmortalizar el momento. A unos seis o siete metros al NW y un poco más abajo de donde el GPS indicó el punto exacto, sobre una roca de mayor tamaño, hay tres piedras que alguien debió colocar (tal vez hace tres años) para señalar la confluencia.

Me alejé del punto unas cuantas veces en varias direcciones y volví a él para confirmar que era correcto. Todos los intentos me llevaron a menos de un metro de la primera aproximación, así que lo dimos por bueno e hicimos las correspondientes fotografías desde la confluencia. En alguna de las fotos, se puede ver el montoncito de piedras al que me refería anteriormente.

Estuvimos un rato por la zona, localizando casetas y campos en el mapa con la ayuda de la brújula y la de Jesús para identificarlos. Al regresar al pueblo, se había corrido la noticia de nuestra visita, despertando cierto interés entre los lugareños y recordando algunos la visita que tuvieron, hace algunos años, de unas gentes que llegaron de Valencia con la misma intención que nosotros.

No nos dejaron marchar sin comer, ya que Lorenzo, hermano de Jesús, y su esposa Carmen, nos invitaron a compartir el rancho que habían preparado para celebrar de Lorenzo, y dos de sus hijos. Al final, nos reunimos 12 personas en torno a la mesa.

Resultó una experiencia estupenda que, además del encanto del entorno, tiene para nosotros un valor sentimental por ser el pueblo donde Pilar pasó todos los veranos de su infancia. Además, ahora sus habitantes saben que Rudilla tiene algo más.

English

25-Sep-2005 -- We left from Zaragoza to visit 41N 001W and spend the day outdoors.

The road is good up to the first half. Then it gets narrow, has lots of holes and becomes curvy, it is still worth while due to the variety of scenery. It is worth mentioning the Huesa del Común castle, a pause on the journey is a must.

Once in Rudilla, where Pilar’s mother was born, we visited some relatives and told them about our plan.

We left town walking towards the confluence. Alter a short while we heard an engine, it was Jesus, Pilar’s uncle, on a quad and was curious about the confluence, he parked his vehicle and joined us on our walk.

We found some evidence of the Civil War Spain had in 1936, quite intense in this part of Aragon. We climbed on the North West side of a hill were the confluence is at 1249 meters above sea level. The views where great, we could identify places at more than 50 kms away.

We kept walking, the GPS indicated “Arriving destination” and Pilar readied the camera. At about six meters from the exact point there is a marker, probable left three years ago on a previous visit.

We spend some time locating other places with the use of our compass. Once back in town we found out that our visit was of interest to some people who remembered the previous visitors who CAME from Valencia.

We were not allowed to leave without sharing with 12 people the meal prepared in honor of Lorenzo, Jesus’ brother.

A great experience and a wonderful place, plus the sentimental aspect of being the town where Pilar used to spend the summer during her childhood.